Micro-relato: El absurdo imaginario

Despierto a la 6 : 25 a.m. la esperanza de morir se desvanece una vez más, el dolor sigue ahí, pero tú no, te marchaste hace tiempo, te deje ir... Eso le digo al corazón, es que últimamente el idiota se pone nostálgico. 

Micro-relato: Cuando te encuentre

Estoy atorado entre la imposibilidad de existir y la ruina de tus ojos, aunque no se realmente que signifique eso, pero fue un pensamiento que se incrusto en mi cerebro como una tabique de cemento... Quizás es así como comienza el aislamiento.

Amanece, abro mis ojos desesperados como si esperara hallar  en las paredes azules de mi recamara la respuesta a mi infortunio... ¿Cuantas veces ha sonado la alarma? Un pregunta inútil.

Micro-relato: confesiones cafeteras

Siempre fui un doble cara... La verdad es que yo no lo pensaba así, pero mi madre que es como una suerte de gitana o adivina lo suposo desde que asome mi cabeza  por entre medio de sus piernas. Yo nunca entendí eso de hacer las cosas bien, no sabia que era bien o mal y no tenía ni un interés de averiguarlo, yo prefería mirar las nubes y soñar como seria tocarlas. Prefería imaginarme como era Dios, investigar que era la nada, ver las gotas de lluvia en mi ventana y los ríos que dejaba la tormenta en mi colonia.

Micro-relato: la noche en que llegue temprano a casa.

Tengo la próstata inflamada, o el colon, o el estomago, o el hígado, o la vejiga, la cosa es que la orina arde, por eso ya no orino, me arde la uretra, a mis treinta tantos no debería de vivir así, pero ve tu a saber por que uno vive así, cosas de Dios dicen los viejos y mis veinte tías. Como aquellas cosas: la hormiga que pisas, la abue que tiene cáncer, la hoja que cae del árbol, mi mujer montando a mi amigo. Cosas de Dios.

Micro-relato: reflexión en medio de una polución

Mi yo me secuestro. El patrimonio que me heredo la humanidad ha sido el del desdoblamiento, la capacidad de mirarte a los ojos, abrazarte, amarte y acuchillarte un segundo después del orgasmo.

Micro-relatos Mujer Amarga

Y no es que el café sepa malo, por que si sabe malo no es el café, lo que le da esas notas de amargura eres tú, es que lo bebo pensando en ti y ve tú a saber que el café tiene la culpa mujer, por que cuando lo bebo me sabe a ti. 

Cuando la Suerte besa.

pero si te has quedado vacía, sin sentido, sin nada.

Y es que hoy me case con la suerte, la volví hacer, no conforme con mi matrimonio fallido con esperanza que casi me lleva a la muerte ¡pum! que me encuentra la suerte tomando tequilita en el bar lolita, y es que se parece tanto a esperanza que me asuste cuando la vi entrar y es que a esperanza yo la miraba en todos lados, arriba, abajo, oriente occidente, norte, sur etcétera y etcétera y mas etcéteras,  etcéteras interminables, etcéteras agónicos. Fantasmas mentales decía mi analista, repercusiones de la culpa decía mi sacerdote, y que te digo de mi madre, ay mi madre pobrecita de ella, a su juicio si hay que tenerle miedo respeto o lo que sea pero hay que tenerle algo "ya vez por ser mal hijo" y ahí si que no había salida, ni remedio ni solución por que uno regresar al pasado pues no puede, pero bueno yo ya estaba harto de estar viendo esperanza ahí a donde ponía la vista pero no es suficiente estar harto para dejar de ver por quien tu la vida dabas (la verdad es que yo no habría dado mi vida por ella, solo mi honestidad )para colmo mi hermano menor no claudicaba en su ahincó de mostrarme una vida llena de placeres de cama en cama , de tipa en tipa, de falda en falda, pero es que no somos iguales, la misma educación, si, la misma sangre, si, el mismo color de piel, si. Pero yo soy tan fácil e improbable, me enamoro de imposibles por eso la mayor parte del tiempo me gusta estar ahí solito en las profundidades de la inconsciencia, navegar por la diferentes capas de mi personalidad, el frío la muerte, lo obscuro, una eterna necesidad de fundirme con la nada,  pero es que en cuanto tengo contacto con una mujer imposible es que me vuelvo loco, que loco digo, tonto, idiota, como el espantapájaros del mago de OZ, historias alternas cuentan que este mismo espantapájaros  que era un erudito en las materias de la existencia  que conoce a Dorothy y a su jodido perro y ya sabrás tu lo que ha pasado y si no sabes pues busca Montt el sabrá decirte. déjame regresar, ahí, a donde hablaba en un principio, ahí en el bar lolita, chupando tequilita sumido en mis depresiones, en mi falta de madurez, en pensamientos antropomórficos, que entra la Suerte y después de que paso el susto y mis ojos enfocaron a esta dama de existencia divina de cabello rojo, piel blanca, vestido negro, hermosisima , impactante, mis ojos se llenaban de plenitud, de agradecimiento, de satisfacción y de todos sus sinónimos, el alma se llena, no se de que cosa se llena , pero se llena, se siente calientito ahí donde estaba el vacío, quizás aun siga vacío pero esta calientito y eso basta y eso basto.

FICCIÓN o cuando las estrellas duermen

Ni que lo digas, a veces pienso en las noches en las que uno no esta, en las que uno anda lejos de aquí buscando sabe que cosa o perdiendo sabe que cosa, la cosa es, que uno no sabe si gana o pierde, avanza o retrocede, pero hay que ir por ahí como hacen los grandes, como hacen los niños, hasta encontrar, hasta reír, hasta llorar, sueña, vive, pero por favor no te mueras, no te vallas.

 En esas cuestiones uno piensa cuando uno no tiene nada que hacer, cuándo el tiempo se escurre entre tus dedos, mientras el café se enfría… me gusta imaginarte sentada por ahí en algún lugar utópico, frio o desolado, pero que al fin acabo sea utópico para que mi imaginación heroica entre por ti a salvarte.

No me exijas realidad por que no la se, veme aquí confundido en la calle o en la cama, de esas veces que no sabes si estas dormido o despierto, entiende, este es mi idioma, en esto me construyo, en esto me convierto, en una letra que no pertenece a ningún abecedario.

Personas que no deben existir

Las noches muerden, apestan, las odio…

Mira tu que venir a decir que apestaba, en mi cara, en mi terreno, déjame decirte que este cabron los tiene puestos, bien puestos. No como la mayoría de nosotros que hablamos a espaldas, que envidiamos en secreto al amigo y al enemigo, que de honestidad no tenemos nada. Pero este cabron que me busque de esa manera, que me apunte con el dedo índice mi pecho, advirtiéndome de que no toleraría otro acción irresponsable como las que se hacer. La verdad es que quedan pocos hombres como él la mayoría hace eso ateniéndose a pistola en mano o a secuaces por detrás. Sabia que no tenia que discordar con mi hermano siempre a sido un idealista, un reformador, revolucionario, mira que el piensa que el mundo va a cambiar, que nuestro pueblo va a cambiar, aun tiene fe en  las cosas buenas, la verdad es que no se como no se embarra con la mierda si habita en ella, no, claro que no, el a pasado por horrores imaginables, la violación de una hija, el secuestro de un hermano y uno que otro robo, nunca acepto mi ayuda, que no me quería deber nada, y sabes que un hombre que no anda armado en estos tiempos que vivimos la verdad es que hay que temerle y yo empiezo a temerle, no, no te rías, mira que si él me recuerda algo, algo que me atormenta, algo que perdí, las cosas bonitas de la vida, la esposa, los hijos, los paseos, lo que pudo ser, pero es que me mostraron los billetitos y que estos me encandilan, olvide que quería ser escritor, olvide los libros de papa, los cuentos de mama, todo ese mundo de fantasía de ilusión los cambie por realidad y veme que quiero creer que valió la pena mírame con todo el poder y el miedo que impongo, mi sola presencia hace que los demás bajen sus ojitos, su cabeza, no tengo amor pero tengo sexo con quien quiera, tu crees que quisiera regresar a esos cafés de antaño cuando deambulaba por calles queriendo encontrar magia, o cuando encendía un cigarro y me llenaba de sueños o tomar aquella mano suave y pequeña que calmaba mi ímpetu, ¡no cabron! mira que no vuelvo, ahora mi cartera esta llena, valgo ahora, pero cada vez que veo a ese cabron me recuerda esa antigua vida. No, no quiero que lo escarmientes, ni que le des una paliza, quiero que lo mates.

LA CHICA DE BOCA DE FRESA

Y es que cuando uno quiere pues que ya no se puede y cuando se puede pues que no se quiere. Ve tu a saber que es lo que significa, pero lo único claro: es que uno no hace nada.

Su falda era pequeña no estaba categorizada en la lista de las minifaldas, solo se que dejaba al descubierto esas piernas largas y hermosas, faldita de color azul con rallas blancas o blanca con rallas azules no se por que me recuerda a la cuestión de las cebras y a su eterna angustia de no saber si son negras o blancas a lo mejor por aquella cebra borracha  o drogada que estaba la taberna del tío Sam , yo había llegado ahí con el corazón roto, estrictamente a tomar una par de cervezas para aliviarme un poquito, pero que te voy a mentir a ti, si yo soy alcohólico y el corazón roto era el pretexto perfecto para chupar sin parar y en intro de esa borrachera termine haciéndome amigo de la cebra Gutiérrez  y de su platica,  de su angustia que padece el y todos sus congéneres que su problema era generacional, que la historia no podía ayudarles gran cosa, solo que de repente apareció la primera cebra así de la nada, que por eso el en lo personal tomaba, no sabia quien era, ni de donde venia, ni para donde iba, que por eso lloraba para aliviar un poquito su angustia de no tener referencia, pero te digo, su angustia era sincera esas lagrimas eran  reales, en serio y eso que yo eh visto a varios tipos llorar y en la gran mayoría de estos tipejos sus lagrimas son falsas, pero los de esta cebra te juro que eran reales.

Pero mira que si ya me desvié del tema en cuestión y no es que las cebras no sean importantes pero es que esta chica que no dejaba de mirarme que no dejaba de absorberme con esos ojos, ojos que me recordaban a la muerte, no te asustes hombre, sabe que yo conozco ala  muerte e tomado cafecito con ella, me ha escuchado llorar y la muerte déjame decirte que no es fea, nada fea. Bueno te sigo diciendo,  y es que cuanto mas veía a esta mujer me sentía ligero, ligerito, suave, como si volara como si los miedos desaparecieran, así como cuando la muerte me invito a volar unos segundos aquella noche de agosto en las vías que cruzaban la ciudad capital había decidido cortarme las venas no como lo hacen los suicidas y sus cortes longitudinales mis cortes eran transversales, no quería acabar con mi vida te aclaro  quería acabar con el dolor, solo con el, y es que el dolor mata y yo no quería morir. Y bueno que me llega la muerte pero quítate esa imagen de túnica negra, guadaña y huesos. Era de piel blanca de ojos azules, de boca de fresa cabello agarrado con un listón azul que hacia juego con su faldita blanca y rallas azules. si la cebra hubiera estado ahí te lo juro hombre que su angustia hubiera sido aliviada.